Cuando Shrek y la princesa Fiona retornan de su luna de miel, los progenitores de ella los invitan a visitar el reino de Muy Muy Lejano para festejar la boda. Para Shrek, al que jamás abandona su leal amigo Asno, esto forma un enorme inconveniente. Los progenitores de Fiona, por su lado, no aguardaban que su yerno tuviese un aspecto semejante y, mucho menos, que su hija hubiese alterado tanto. Todo esto altera los planes del rey en comparación con futuro del reino. Mas entonces entran en escena la astuta Hada Madrina, su insolente hijo el Príncipe Cautivador y un minino muy especial: el Gato con Botas, especialista cazador de ogros.