Willie (Morgan Freeman), Joe (Michael Caine) y Al (Alan Arkin) son tres amigos retirados a los que el sistema les ha congelado su plan de pensiones. Estresados por el hecho de que no pueden abonar las facturas, están resueltos a recuperar su dinero. Los tres ancianos deciden entonces exponerlo todo y embarcarse en un irresponsable plan consistente en atracar al mismísimo banco que se quedó con su dinero.