En un súper, los comestibles que viven allá adoran a los compradores humanos considerándolos como dioses que los llevan al Gran Más Allí cuando se adquieren. Entre los productos comibles del súper está una salchicha llamada Frank, que sueña con vivir con su novia, un bollo para perros calientes, Brenda, en el Gran Más Allí, donde por último puedan consumar su relación. Los bultos de Frank y Brenda son escogidos mas sus celebraciones son interrumpidas en el momento en que un frasco de Miel Mostaza devuelta, que asimismo ha sido escogido, asevera a los otros productos comibles en la cesta de compra que el Gran Más Allí no es lo que creen.