En el siglo IV, Egipto era una provincia del Imperio Romano. Su urbe más simbólica, Alejandría, se había transformado en el último baluarte de un planeta en crisis, confuso y violento. En el año trescientos noventa y uno, las revueltas callejeras alcanzaron una de sus instituciones más legendarias: la biblioteca. Atrapada tras sus muros, la refulgente astrónoma Hypatia, filósofa y atea, lucha por salvar la sabiduría del planeta viejo, sin percibir que su joven esclavo, Davo, se discute entre el amor que le profesa en secreto y la libertad que podría lograr uniéndose al irrefrenable ascenso del cristianismo.